viernes, 1 de diciembre de 2023

ANDURRIALES

1 de diciembre de 2023, se nos va acabando este año lleno de conflictos por la mayor parte del globo. Le diremos adiós con una mezcla de incertidumbre, miedo, tristeza, horror... y pensando en lo que nos deparará el que está por venir. 

Yo he intentado añadir un poco de humor en este minirelato que, como me ocurre en muchas ocasiones, fue el resultado de la palabra andurriales que nos propuso en su día nuestra profesora de Escritura Creativa.

Bueno, aquí lo tenéis.

Julita


 Caminando, caminando por aquellos andurriales, fui consciente de la belleza que puede encerrar la tierra cuando se es capaz de mirarla con los ojos de la ilusión y yo, estaba ilusionada.

  Una nueva vida se abría ante mí y estaba segura de que sería completamente diferente a la que había dejado atrás.

  Iba cantando al sol, a los pájaros, a los árboles, incluso a los insectos que se cruzaban en mi camino.

  Mi felicidad era tal que creo que me nublaba la vista, pues no fui capaz de ver el pequeño riachuelo que atravesaba aquel campo y caí de bruces en él, lo que me hizo salir de mi ensimismamiento al instante.

  Entonces noté un olor nauseabundo que me impregnaba y que provenía de las aguas fecales que eran las que discurrían por ese cauce.

  Volví a mi casa refunfuñando y renegando de que algunos andurriales dejen tan mal recuerdo ya que aquél había cortado de cuajo mi ilusión.

Julita San Frutos©

miércoles, 1 de noviembre de 2023

EL FUTURO EN EL BOLSILLO

 Buenos días, hoy 1 de noviembre de 2023, día de todos los santos, voy a publicar un relato que no tiene nada que ver con la festividad pero sí con el momento, ya que es ahora cuando algunos frutos y algunas verduras tienen su momento culminante.

En fin, aquí os lo dejo, desconectar durante unos momentos que serán los que necesitéis para leerlo.

Julita

  La familia de Miguel tenía un campo de naranjas y desde muy pequeño le encantaba acompañar a su abuelo a recogerlas. Cuando encontraba una redonda y brillante, la que le parecía más bonita de todas las que había en los árboles, se la guardaba en el bolsillo y la conservaba como un tesoro.

  Cuando llegaba la hora del descanso, Miguel la pelaba y muy despacio, poquito a poquito, iba saboreando cada uno de sus gajos mientras pensaba que no conseguía entender como a muchos de sus compañeros de colegio no les gustaban las naranjas.

  Algunas veces las llevaba a clase y, a la hora del recreo se las ofrecía, pero no eran muchos los que las cogían, incluso le miraban extrañados de que prefiriese comerlas en lugar de los almuerzos que solían llevar ellos. Así que un día, con la ayuda de su madre, pelaron unas cuantas y las cortaron en rodajas. Después las fueron colocando en una gran fuente y por último les echaron azúcar por encima.

  Muy contento se encaminó con ellas al colegio pues se había propuesto que debían comerlas y, una vez allí, colocó la fuente encima de una mesa y llamando la atención de todos los niños y niñas, les fue pidiendo que las probasen. Algunos lo hicieron con recelo, pero después no tuvieron más remedio que reconocer que estaban muy buenas. A otros no tuvo que insistirles mucho pues al verlas se acercaron enseguida. La verdad es que fue todo un éxito, pues hasta los profesores quisieron también comerlas.

domingo, 1 de octubre de 2023

RESPIRANDO AIRE PURO

 Hoy 1 de octubre de 2023 os voy a dejar un relato que se me ocurrió una mañana en que no estaba yo en uno de mis mejores momentos, quizá molesta por alguna razón que ahora ya no recuerdo. Pero sea como sea, lo escribí y ahora os lo dejo aquí para que podáis leerlo y juzgarlo como os parezca.

Julita

 
 
  Son las 7 de la mañana cuando me asomo a la ventana. Las nubes solícitas me saludan. A pesar de ser un saludo agradable, no puedo evitar pensar que me resulta un tanto autosuficiente, como si me quisiesen decir unos buenos días, pero pensando en que pueden, si quieren, taparme el sol sin que yo sea capaz de hacer algo por evitarlo.

  Me quedo pensando en que tienen razón, porque yo, como ser humano que soy, no puedo ir en contra de la naturaleza y ellas, las nubes, son parte del universo con más derechos, pues existen como tales antes de que yo ni siquiera fuera un proyecto y seguirán estando cuando haya desaparecido.

  Tengo claro que no son las mismas nubes siempre pues, aunque mi cerebro no está demasiado claro, sé que se forman por la evaporación del agua de los ríos, del mar y de cualquier otra que se sitúe en algún lugar asequible para ellas. Pero siento respeto por esa formación parecida al algodón que cubre el cielo y que nos manda la lluvia cuando corresponde o cuando lo consideran oportuno.

sábado, 2 de septiembre de 2023

UN FUTURO POR DISEÑAR

 Buenos días, estamos a 2 de septiembre de 2023, me he retrasado un día en publicar este mes, pero espero que podréis perdonarme.

Os dejo un pequeño relato en el que no ha influido ni mi profesora del Taller de Escritura Creativa (cosa un poco rara últimamente) ni nadie que no haya sido yo misma.

Bueno, aquí lo tenéis.

Un saludo a tod@s l@s que me leéis.

Julita

  Sentía el silencio de la noche rodeando mi cuerpo. Los miedos volvieron a ocupar mi cerebro. Quería ser fuerte, arrastrar conmigo los temblores que, desde hacía un tiempo me convulsionaban. Intenté pensar en ti, recordar lo que nos llevó a la situación en la que nos encontrábamos en ese momento, pero fue peor, mucho peor. Cada vez que mi mente retrocedía, mis manos temblaban.

  Debía calmarme. Me tumbé en la roca en la que me encontraba sentado y decidí contar las estrellas. Incluso les puse nombre. Entonces una de ellas se destacó sobre las demás brillando con un brillo inesperado. Estaba seguro de que quería llamar mi atención. Que parpadeaba solamente para mí.

  Me incorporé de inmediato como si un resorte me hubiera empujado desde la roca y extendí mi brazo seguro de que podría alcanzarla. Pero cuanto más me afanaba yo por conseguirla, más se alejaba ella.

  Volví a sentarme en la peña y, aunque hacía tiempo que había dejado de fumar, saqué un cigarrillo del paquete que siempre llevaba conmigo de reserva por si, como ahora, necesitaba calmarme porque los nervios me traicionaban y, lo encendí.

  Al dejar que el humo recorriese mis entrañas, pensé de nuevo en ti. Recordé cuando me decías que no debía hacerlo, que mientras tuviese tabaco al alcance de mi mano no iba a poder dejarlo nunca. Pero llegué a la conclusión de que ahora me daba igual, porque ya nada me importaba y me hice la pregunta que llevaba guardando en mi mente ¿Qué diferencia podía existir entre morir de un cáncer de pulmón o hacerlo consumiéndome poco a poco por no poder tenerte?

martes, 1 de agosto de 2023

EL EXTRAÑO CASO DE LA CUCHARA

Buenos días, hoy 1 de agosto de 2023 y, como en muchas otras ocasiones, publico un relato basado en una frase que nos propuso nuestra profesora de Escritura Creativa hace ya un tiempo y que yo he utilizado como título.

Espero que os entretenga un ratito en estos días de tanto calor.

Julita

  La mesa estaba dispuesta y en perfecto orden: el plato en el centro de cada comensal; a la derecha el cuchillo con el filo orientado hacia dentro como mandan los cánones de la buena etiqueta y la cuchara con la cavidad hacia arriba; a la izquierda el tenedor con las puntas hacia lo alto. Se habían colocado, como no podía ser de otra manera, a 3 cms. de cada plato. Andrea lo había supervisado todo personalmente, pero lo comprobó de nuevo cuando Esther, su criada de confianza, le dijo que ya habían terminado.

  Los comensales llegarían de un momento a otro. Primero se reunirían en el salón principal y tomarían un aperitivo en un ambiente distendido, allí esperarían a que la cocinera le avisase de que la cena estaba lista, sería en ese momento cuando les haría pasar al comedor.

  Un último vistazo antes de cerrar la puerta le convenció de que había quedado espléndido, las flores y las luces hacían que la estancia, a pesar de ser tan grande, resultase acogedora. No podrían reprocharle nada, aunque, a decir verdad, desde que trabajaba en esa casa y de eso hacía ya unos cuantos años, nunca les había dado motivo para ello. Estaba muy orgullosa de su trabajo, tanto como lo estaban sus señores.

  Subió a su cuarto y se cambió quería que, de un solo vistazo, fuesen capaces de reconocer que era la persona controladora, pero a la vez amable, que tanto valoraban. Un austero vestido y un recogido sencillo que no permitiese que alguna greña se escapase, conseguirían el efecto.

  Se apresuró a reunirse con el mayordomo, pues ellos dos, junto con los dueños de la casa, eran los que tenían que recibir a los invitados que no tardaron en empezar a llegar. Un criado se ocupaba de acompañarlos al salón donde los camareros y las camareras les ofrecían bebidas y bandejas con diferentes canapés y frivolidades.

sábado, 1 de julio de 2023

CONVERSACIÓN POSPUESTA

 Un nuevo mes, julio, y una nueva publicación. En esta ocasión, como en tantas otras, se trata de un relato que nació cuando, nuestra profesora de Escritura Creativa, nos propuso hacerlo con la palabra dilapidar

Yo opté por escribir el que ahora podréis leer cuando tengáis un ratito para hacerlo.

Un saludo y que el calor no os agobie demasiado.

Julita

 Tengo que decírtelo Miguel, llevo demasiado tiempo posponiendo esta conversación y ya es hora de enfrentarme a ella, aunque estoy seguro de que cuando me escuches te vas a sentir decepcionado, pero me lo he estado replanteando y no puedo seguir guardándomelo.

  En el momento en que te lo diga no vas a verme con los mismos ojos. Bueno, sabes que esto es únicamente una expresión, quiero decir que tus sentimientos con respecto a mí, van a tornarse diferentes.

  Hemos estado siempre juntos, hemos jugado, hemos estudiado, nos hemos ayudado; nos hemos reído e incluso, si ha sido necesario, nos hemos apoyado el uno en el otro cuando de llorar se trataba.

  Por todas estas razones es por lo que me cuesta tanto sacar el tema, pero como te digo, guardarlo dentro de mí por más tiempo ya no tiene sentido.

  Creo que debo sentarme… Sí, aquí estaré bien… Podrás escucharme sin perder detalle y después me enfrentaré a tus reproches, porque sé que los habrá, porque sé que me los merezco, porque confiabas en mí y no te he pagado con la misma moneda.

  Bien, ¡allá voy! No quiero dilatarlo más; ¡No me queda nada de lo tuyo! ¡Lo he dilapidado todo, todo! Y sé que era mucho. ¿Qué como ha sido me preguntas? Lo que tú temías, sabes que intenté seguir tus consejos y que por un tiempo lo conseguí, pero las adicciones penetran en tu ser y se apropian de tu mente y de todos tus sentidos.

jueves, 1 de junio de 2023

MUJERES POR LAS QUE QUITARSE EL SOMBRERO

 El día 14 del pasado mes de abril, La Pobla de Vallbona libró los Premios Igualdad. El relato que yo presenté quedó finalista y hoy lo publico aquí en mi blog para que podáis leerlo y opinar sobre él.

Un saludo a tod@s.

Julita

María trataba de concentrase en sus estudios sentada a la mesa de la terraza y apoyando los codos sobre ella. Con sus veinte años recién cumplidos quería comerse el mundo. Le gustaba soñar que algún día sería alguien importante.

Estaba ensimismada y quizá por eso no la oyó llegar, ni sintió su presencia cuando se sentó a su lado, pero escuchó sus palabras y el cariño con el que las pronunciaba.

—Hija… ¿en qué piensas? —Apoyó la mano sobre la suya y la miró con dulzura.

Era su abuela, quien, con ese sexto sentido que tenía, esa virtud de casi adivinar lo que estaba pensando, empezó a contarle una historia:

“Hace tiempo, tanto que se ha perdido en la memoria, el mundo era oscuro, triste, silencioso, pero apareció la mujer y se iluminó. Desde ese momento las flores crecieron, los pájaros cantaron con sus alegres trinos y el sol brilló en todo su esplendor. De su vientre nacieron nuevas vidas que alimentó y cuidó, consiguiendo con ello que concibieran otras muchas.

Con su hacer silencioso acabó siendo el centro de todo, aunque sin reconocerse. Pero ese silencio se volvió en su contra; aceptó quedar recluida, incluso utilizada, en muchas ocasiones, por el hombre, como moneda de cambio”.

Hizo un gesto, entrecerrando los ojos, como queriendo rectificar el pasado y, al mismo tiempo, asintiendo para reconocer que lo acaecido ya no se puede cambiar. Le dio una palmadita en la mano y continuó su relato:

“Cuando fue consciente de su error quiso remediarlo manejando los pocos medios que tenía a su alcance y comenzó una gran lucha. Tuvo que llevarla a cabo en solitario, pues cuando exponía sus ideas no conseguía ningún apoyo ni de las mismas mujeres, en igual situación que ella, ni por supuesto de los hombres, salvo en contadas ocasiones. Pero no cejó en su empeño y con mucho tesón consiguió que unas pocas cambiasen de opinión y que poco a poco empezaran a unirse.

lunes, 1 de mayo de 2023

CARTA DE AMOR DE GINEBRA

Buenos días, nos encontramos a 1 de mayo de este 2023 y hoy voy a publicar la carta que, el pasado 5 de abril, me hizo merecedora, en la Biblioteca de Olocau, del título de "La persona más romántica", ya que fue ese día el que libraron los premios del "I CONCURS DE CARTES D'AMOR I AMISTAT".

Aquí la tenéis para que podáis juzgar por vosotr@s mism@s.

Julita

Hola mi amor:

Te escribo, aunque se que te dije que no iba a hacerlo, pero es que los días sin ti se me hacen interminables. No sabes las veces que me he arrepentido de haber tomado la decisión de venir y dejarte, pues sufro porque estoy segura de que tú también añoras mi ausencia.

¡Me dejé convencer y no debía de haberlo hecho! ¡Pero me insistieron tanto! Me dijeron que iba a ser poco tiempo y claudiqué. Tenía que haber pensado en ese momento que tú eres lo más importante para mí. Eres mi complemento, mi tabla de salvación. Saber que estás a mi lado me mantiene viva, tanto, que a veces pienso que no sabría que hacer sin ti.

Las noches, en la soledad de mi habitación, me falta tu abrazo y notar tu aliento en mi nuca. Cuando extiendo mi mano y no puede acariciarte, me desvelo. Me desvelo para sentir la añoranza del calor de tu cuerpo junto al mío.

Cuento las horas que me quedan para estrecharte entre mis brazos y decirte al oído todas las palabras bonitas que se que te gusta escuchar de mi boca. Te llenaré de besos, todos los que estoy guardando para ti.

No quiero entristecerte con mi congoja por eso voy a decirte lo que haré en cuanto llegue a nuestro hogar:

Dejaré mis bártulos en la entrada para no perder tiempo. Cogeré el coche y me acercaré a la residencia donde te dejé. Les apremiaré para que te saquen de donde quiera que te encuentres y te esperaré con los brazos abiertos para recibir tus lametones.

Camino de casa me contarás como te han tratado y si me has echado de menos. Yo te contaré lo triste que he estado y te daré esta carta para que la destroces con tus uñas y tus afilados dientes. Borraremos este tiempo que hemos estado separados y recuperaremos el perdido. Te llevaré a tu parque favorito, para encontrarte con tus amigos y correr como un loco con ellos, mientras, yo te miraré orgullosa sabiendo que tengo a mi lado al mejor amigo que jamás hubiese podido imaginar.

 

Para ti Trosky.

 

                                                  Tu ama Ginebra

 

Julita San Frutos©

sábado, 1 de abril de 2023

MI BAUTIZO

 1 de abril de 2023, un día como otro cualquiera pero en el que, por alguna razón que desconozco, pienso que debo publicar el capítulo cuarto de mi libro: ELUCUBRACIONES DE UNA MENTE INCONCLUSA.

 Para los que ya lo habéis leído os refrescará la memoria y para los que no, podrán dar su opinión sobre lo que consideren oportuno.

Sea como sea, feliz mes de abril para tod@s. Aprovechad al máximo las vacaciones de Semana Santa.

Julita

  Como ya he dicho, he acarreado con la decisión de mi padre y, por supuesto, el beneplácito de mi madre, durante toda mi vida. Y no es que me pese, en ocasiones todo lo contrario, pues me permite ser, por ese motivo, diferente a los cánones establecidos en nombres, ya que a pesar del tiempo transcurrido y de lo que hemos avanzado, siguen pensando que lo utilizo como un diminutivo y que mi verdadero nombre es Julia, pero yo, consciente (pues mi madre se ocupó de ello) del problema que tuvo mi padre para que me lo impusieran, lucho por que se reconozca como nombre propio.

  En esta lucha siempre he tenido la ayuda, aparte por supuesto de mis padres, de mis hermanos y después de mi marido e hijas. En fin, creo que al final es una reivindicación de todas las personas que por una razón u otra han llegado a formar parte de mi existencia y eso, para mí, es un acto de sororidad.

  El día de mi bautizo, doce días después de que hubiese aterrizado en ese hospital, fuimos a la Iglesia (supongo que la más cercana a mi casa) todos los miembros de mi familia, excluyendo a mi madre, ya que, por aquél entonces, las parturientas permanecían en sus hogares mientras el neófito o neófita recibía las aguas bautismales. Después, y dado que solía celebrarse con un buen desayuno en casa, sí que formaban parte del séquito, disfrutaban y, por supuesto, organizaban para que todo estuviese perfecto y todos volviesen a sus casas con el estómago repuesto del ayuno que había que observar para recibir la sagrada hostia (si no se recibía resultaba muy mal visto entre la sociedad, pero dudo mucho de que mi padre fuese uno de los que se colocase en la cola).

miércoles, 1 de marzo de 2023

LA CRUDA REALIDAD

Buenos días, hoy 1 de marzo de 2023 aprovechando que vamos a dar comienzo a la semana de la mujer he optado por publicar un relato que tiene mucho que ver con la igualdad entre hombres y mujeres.

Espero, como siempre, que disfrutéis leyéndolo.

Julita

  Tendida en el suelo, con el dolor de todos mis músculos ateridos recorriendo mi cuerpo y con el sudor surgiendo de cada uno de mis poros cubriéndome la piel, trato de borrar de mi mente la angustia que me atenaza. Aunque, no por ello, dejo de ser capaz de darme cuenta de que puedo evitar la dureza que ayudaría a que mi padecimiento fuese más intenso, gracias a la esterilla de caucho natural que mantiene mi cuerpo separado de las losetas.

  No tuve más remedio que ser totalmente consciente de que con mi frustración, estaba arruinando no únicamente mi vida, que por otra parte me parecía que no tenía sentido, sino la de mi familia, pues no era capaz, al llegar a casa, de evitar enzarzarme en una gran discusión por la más mínima causa.

  Tantos estudios perdidos, tanta preparación tirada a la basura como quien tira un papel arrugado. Tanto dinero gastado inútilmente. Tantas promesas incumplidas, tanta angustia, tanta sinrazón…

  Hace 10 años que trabajo en la misma empresa. Me eligieron por mi capacidad, por mi saber hacer, por mi empatía… al menos eso fue lo que me dijeron, pero veo con desesperación que por más que me esfuerzo, no avanzo en mi puesto de trabajo.

  Cada vez que pido una entrevista con mi jefe superior, me asegura que mis aptitudes son óptimas y que soy la persona idónea para poder asumir un puesto de trabajo superior y que me tendrán en cuenta en el momento que surja.

  Pero por delante de mí pasan hombres que han entrado después que yo, que no me superan en cualidades, pero que por el simple hecho de serlo, optan al lugar que en realidad debía de corresponderme a mí.

  Por esa razón tomé la determinación de apuntarme al gimnasio y cada día, cuando acabo mi jornada laboral, vengo aquí para ahogar mi fracaso. Le exijo tanto a mi cuerpo que en ocasiones el entrenador tiene que acercarse y pedirme que descanse, que pare con los ejercicios pues voy a acabar lastimada. Pero no puedo hacerlo, necesito descargar la rabia que me corroe, como una mala enfermedad, las entrañas.

miércoles, 1 de febrero de 2023

LA VIDA

Un nuevo mes, un nuevo día y hoy 1 de febrero de este 2023 casi recién estrenado he decidido publicar un pequeño relato que, como aparece en el título, he dado en llamar "La Vida".

En él he utilizado una serie de colores que me parecen muy originales y que, como es mi costumbre, los he destacado en cursiva para que sean fácilmente distinguibles.

En fin, que disfrutéis leyéndolo.

Julita

 
 
  Asomada a la ventana cuando el sol se iba poniendo por el horizonte, me quedé mirando los colores con los que nos obsequia la naturaleza. El cielo se presentaba ante mis ojos con una mezcla de cinzolín y punzó que me dejó, por espacio de unos minutos, totalmente arrebolada.

  Tuve la sensación de encontrarme en un mundo distinto, uno donde no tenían cabida los actos incongruentes que, como un mantra, repetimos los seres humanos.

  No pude menos que dirigir mi mirada a las olas que rompían en la arena de la playa y me encontré con un verdemar intenso únicamente diluido por la espuma que el agua formaba. Eran pequeñas esferas y tuve la sensación de que contuvieran en su interior toda la historia de los siglos y siglos que hemos pasado enviando a los guijarros nuestras atrocidades.

  Como en tantas otras ocasiones en que la melancolía se apodera de mí, una lágrima resbaló por mi mejilla y la vista se me emborronó dando paso a una mezcolanza de tonalidades imposible de definir.

  Los minutos pasaban y no me sentía capaz de apartarme de esa ventana que parecía trasladarme en el tiempo.