jueves, 1 de mayo de 2025

HOY, EL DÍA

 Hoy es 1 de mayo de 2025, día del trabajador y aquí estoy yo "trabajando" para cumplir con la meta que me propuse aquel mes de diciembre de 2016.

Con el relato de hoy he querido reflejar como viví el pasado día 28 en que, el corte de luz, nos dejó a todos perplejos y el caos se apoderó de cada una de las ciudades y pueblos de España, excepto aquellos en los que están acostumbrados a subsistir sin depender de la "Energía Eléctrica".

Bueno, aquí os lo dejo. Juzgarlo vosotr@s.

Julita

Miro a mi amiga y ella me mira a mí. Nuestras miradas se cruzan y se posan en el enchufe inteligente que se encuentra en ese momento en la base de la pared donde acabamos de colocarlo para configurarlo y con total incredulidad nos preguntamos qué ha podido ser lo que hemos hecho para que las luces hayan dejado de funcionar a las 12,30 del mediodía de este 28 de abril de 2025.

Mi marido aparece en la puerta de la habitación y nos hace la misma pregunta. Le respondemos únicamente con una subida de hombros y miradas de duda, pero tratando de disculparnos.

Acudimos los tres al cuadro de luces para comprobar si el interruptor general ha saltado y, para nuestra sorpresa, todo está en orden. Nuestro asombro va en aumento por lo que decidimos llamar a unos vecinos para saber si a ellos les funciona el alumbrado, pero, ¡los teléfonos no nos funcionan ni tampoco lo hace internet!

Mi amiga y yo nos decimos que es imposible que nosotras hayamos montado semejante caos, pero no estamos plenamente convencidas de ello y mi marido tampoco. Él acude personalmente a casa de los vecinos y, ya en la puerta, es consciente de que la situación de ellos es la misma que la nuestra, pues el timbre no les funciona y tiene que hacerse escuchar gritando sus nombres. En realidad, habla con ellos únicamente para confirmarlo.

De vuelta a casa nos refiere la situación y nosotras, sin tener muy claro el por qué, decidimos ir allí. Al abrirnos, nos invitan a pasar y tomar unas cervezas, cosa que aceptamos en el acto con sumo gusto, sin pensar en informar a mi marido de nuestra situación, así que transcurrido un rato prudencial, se presenta para averiguar qué es lo que está pasando y, al ver el ambiente, decide incorporarse a la tertulia.

En eso estamos cuando se filtra un whassap de mi hija en el que nos informa de que es un apagón en toda España y Portugal. Whassap que ya no tenemos opción de responder, pero que nos libra de nuestro malestar por la posible implicación en los acontecimientos.

Somos conscientes de que la situación es extraña, pero que tenemos que enfrentarnos a ella. Los vecinos nos proponen comer en su casa, ya que nos encontramos allí, uniendo los alimentos que cada uno pueda aportar. No tardamos ni un minuto en decidirnos, por lo que aparecemos de nuevo con una tortilla, una ensalada y unas pocas habas con embutido, cocinadas por supuesto por mi marido, ya que tenemos la suerte de que en casa guisamos con gas.

Lo nuestro, unido a las viandas que han conseguido los vecinos, la botella de vino que ha traído mi amiga y la buena armonía que reina en la mesa, hacen que nos olvidemos de la falta de luz y de las conexiones a internet.

Como entretenimiento y para pasar el rato, nos ponemos a jugar a un juego que llaman Rummikub y el tiempo se nos pasa sin apenas darnos cuenta, tanto que, cuando 5 horas después las luces se encienden, es como si ya no las necesitásemos, algo impensable en estos tiempos.

Al despedirnos, lo hacemos con el mismo pensamiento en la cabeza de que es un día diferente, pero que nos ha hecho sentirnos alegres, divertidos, unidos, entretenidos y hermanados.

Ahora me encuentro viendo las noticias en el televisor y me siento un poco culpable porque ha habido gente que lo ha pasado bastante mal, pero pienso que no soy yo la que ha decidido que nuestra vida dependa completamente de la Energía Eléctrica. Así que elimino toda clase de culpa de mi pensamiento y me dispongo a recordar este día para dejarlo grabado en mi memoria.

Julita San Frutos©

 

 


8 comentarios:

Marina dijo...

Genial! Me ha encantado. Y pienso que refleja lo que mucha gente sintió ese 28 de abril que, sin duda, nadie olvidará . Por supuesto que, para un gran número de personas, el apagón fue catastrófico, como lo son otros problemas directamente relacionados con la mundialización y nuestro modo actual de vivir. Seguiremos adelante o el mundo decidirá retroceder? Poco probable esto último! Por ello, adelante! Atravesemos las futuras probables crisis con humor y buena disposición. Gracias Julita.

Juli imagina historias dijo...

Sí Marina, creo que lo mejor es que lo tomemos con humor, o al menos es lo que yo intento, porque lo de retroceder no creo que esté en la mente de ninguno y francamente no sería ninguna mala idea, porque nos creemos muy adelantados, muy infalibles y luego pasa lo que pasa.
Sería genial no depender tanto de la Energía Eléctrica, pero es algo impensable. Mientras tanto nosotros seguiremos guisando con gas, mientras no nos lo quiten, aunque en ese caso, lo haríamos con leña, que para eso tenemos el "paellero".
En fin, parece que estamos preparados jejejeje.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Vosotros sí que lo estáis y es una suerte. Personalmente, cuanto más lo pienso, más convencida estoy de que deberíamos poner un freno a tanta tecnología, a pesar de sus ventajas.

Juli imagina historias dijo...

Pues yo pienso igual que tú, va todo demasiado rápido y no sé si la mente humana es capaz de asimilar a ese ritmo.

Anónimo dijo...

Que buen día pasamos Julita!
No lo podías haber descrito mejor.

Sabrina dijo...

Totalmente de acuerdo!!estamos atados totalmente a la tecnología y no nos damos cuenta de todo lo que tenemos a nuestro alrededor que nos puede hacer felices igualmente.

Juli imagina historias dijo...

La verdad es que sí, pasamos un día fenomenal y me alegro que, siendo parte implicada, lo hayas visto bien descrito. Muchas gracias.

Juli imagina historias dijo...

Sí Sabrina, quizá deberíamos tener más apagones para así ser conscientes de lo que nos estamos perdiendo por culpa de estar atados a la tecnología.
Un abrazo fuerte.