viernes, 1 de abril de 2022

ABRAZOS

Buenas tardes, hoy es 1 de abril de 2022 y aunque los problemas graves continúan, yo he decidido seguir publicando los relatos y las historias que se me ocurren, no se si a alguien le puede servir para desconectar por unos minutos, pero a mí si que me ayuda, por eso quiero dejaros una historia un poco tierna quizá pero que se me ocurrió en una ocasión en que necesitaba de un abrazo y al no tener a nadie a mano, lo escribí.

Un montón de abrazos para todos y todas las que me leéis.

Julita


  Mi piel estaba erizada y mis sentidos relajados, dejándose llevar por la agradable sensación que recorría mi cuerpo. Eso fue lo que me hizo reconocer que, lo que estaba recibiendo, era algo de lo que no había disfrutado nunca. Recuerdo que no quería que aquello acabase y me aferraba a ese otro cuerpo como, si al hacerlo, mi vida hubiese adquirido un sentido diferente. Mi mente se debatía en una mezcolanza de sensaciones difícil de asimilar.

  Hacía poco que había cumplido los cinco años y ahora, cuando el tiempo ha transcurrido, puedo decir que mi vida en aquél orfanato no era exactamente una existencia feliz. Sé que es cierto cuando dicen que no puede echarse en falta lo que no se conoce pero, por alguna razón, sentía que algo necesitaba aunque no supiese explicar el qué.

  Era demasiado pequeño para que esas dudas arraigasen en mi cabeza y en realidad, puesto que nunca había conocido otra vida diferente, debería de haber pensado que era la forma en que transcurriría hasta que fuese lo suficiente mayor para conseguir otra diferente, pero no era así.