miércoles, 1 de abril de 2020

EN CUARENTENA

 Buenos días, hoy día 1 de abril y 18º de nuestro confinamiento, voy a publicar un nuevo relato siguiendo con el propósito que me hice cuando comencé este blog.
Tengo que decir que no era éste el que tenía pensado, pero al escribirle como un trabajo del Taller de Escritura que, dicho sea de paso, continuamos a través del grupo de whassap, me ha parecido que era el mejor día para que podáis leerlo.
Espero que sirva para sacaros una sonrisa.
Un abrazo.
Julita

  Este relato hubiese podido comenzar como lo hacen otros muchos diciendo: Un día cualquiera..., pero no fue así, pues nos encontrábamos a pocas horas de finalizar una de las primeros jornadas en que el Gobierno nos había instado a permanecer en confinamiento y mi marido y yo nos hallábamos frente a frente llevando a cabo uno de los rituales más extendidos en nuestra sociedad: la cena.

  En un momento dado tuve la genial idea de hacer un comentario totalmente ingenuo, o eso fue lo que pensé en ese momento, aunque la realidad se perfiló completamente diferente:

Aprovechando que estamos encerrados, podíamos hacer una limpieza de la casa, pues hace unos días ya que la hicimos fue mi observación.
  ¡Craso error! Ahora, en la perspectiva, me doy cuenta de que no fui consciente de su verdadero potencial, pues estoy cada vez más convencida de que, en el caso de que hubiese nacido en esta época, le habrían diagnosticado con TDA, pero por aquél entonces estas siglas no existían y únicamente le adjudicaron las NSP o lo que es lo mismo: Niño Sumamente Pesado.
  Al día siguiente y después de haber concluido el desayuno, se presentó donde yo estaba, armado con todos los utensilios necesarios para llevar a cabo la idea manifestada por mí la noche anterior.
  Fueron inútiles mis argumentos; que no corría prisa…, que teníamos muchos días por delante…, que podíamos cogerlo con calma…, pues a las 9 de la mañana nos dispusimos a enfrentarnos a unos de nuestros enemigos cotidianos, el polvo y sus consecuencias.
  Se hubiera podido desarrollar con normalidad este cometido, de no haber sido porque a él se le ocurrió otra idea genial y fue la de que ya que estábamos metidos en el asunto, no estaría mal limpiar los azulejos de los cuartos de baño.
  La realidad es que no fueron únicamente esos, sino también los de la cocina y, ya puestos, la emprendimos con los rincones retirando mesitas y muebles aptos para ser retirados (pues nuestra edad no nos permite meternos con los de mayor envergadura); los armarios en los que se guardan esas copas que se utilizan una vez al año; el mueble bar; alguna que otra lámpara, e incluso roperos y estanterías.
  Ni que decir tiene que estuvimos más de seis días sin parar, lo hacíamos únicamente para lo estrictamente necesario, o sea: dormir, comer, ir al lavabo y descansar cuando nuestras fuerzas nos abandonaban.
  En esas jornadas, no paré de dar gracias por encontrarnos en confinamiento ya que no nos iba a permitir acercarnos a casa de nuestros familiares, amigos y vecinos, pues teniendo en cuenta la capacidad de trabajo de mi marido, estaba segura de que sería la siguiente etapa.
  Desde esa noche y hasta hoy, he procurado mantenerme en silencio o hablar únicamente de temas completamente inocuos para que no perjudiquen mi integridad física.

Julita San Frutos©



 

8 comentarios:

Rebekatalart dijo...

¡Me parto!
Y lo hago porque es lo que veo cada vez que tenéis ideas geniales.
Desde luego, hay que pensar muy mucho, qué sugerencias se hacen, más y cuando se está encerrado y la energía se nos sale por las orejas a tod@s.
¡Podemos imaginar la que le sale a papá!
Un fuerte abrazo.

Juli imagina historias dijo...

Un abrazo también para tí, si hay que pensar mucho las sugerencias y sobre todo, como dices, al estar confinados y tratar de evadirse sea como sea. Seguiremos adelante, llevando a cabo cualquier idea que se nos ocurra hasta que volvamos a la relativa realidad.
Julita

Marina dijo...

Muy divertido, en efecto, aunque también muy realista conociendo la capacidad emprendedora de mi cuñado. Confinado dentro de casa, imposible que la sugerencia cayera en saco roto. La que seguro que está la mar de contenta, pero que no puede expresarlo por razones obvias, es la casa !
Seis días dándole al trapo han tenido que dejarla como los chorros del oro.
"No hay mal que por bien no venga". Es un hecho.
Dentro de unos días, como sin duda seguiremos encerrados, volvéis a atacar. Para no aburriros !!!
Un abrazo.

Juli imagina historias dijo...

Tienes razón Marina, la casa quedó de revista después del agotador trabajo, pero no creas que es agradecida, porque ya tiene la capa de polvo que nos llama a la acción, pero en esta ocasión será más "lo que ve la suegra y estaba ciega", como solía decir tu madre.
Un abrazo.
Julita

Débora Llanos dijo...

Jaja! Nosotras llevamos 20 días limpiando a fondo... 😆 Y deseando que acaben las lluvias para poder limpiar los cristales.
El otro día limpié la escalera de la comunidad y no le dejé a mi vecina el cartelito en la puerta para volverla a hacer yo... Sólo te digo eso

Juli imagina historias dijo...

¿No me digas Débora?, lo tuyo es peor que lo nuestro, porque a mi los cristales no me apetece nada hacerlos y encima ¡limpiar la escalera una vez y otra! Sí que estás desesperada😂Un abrazo muy fuerte a las dos🙅‍♀️

Helen Pi dijo...

¡Qué graciosa eres Juli!
Y no te quites méritos porque desde que os conozco que sois súper aseados y siempre lo habéis tenido todo en perfecto estado de revista.
Supongo que, como en todo, la edad va haciendo mella, pero quien tuvo, retuvo.
¡Y aún tienes que dar gracias que no están abiertas las tiendas de decoración porque sino, te veo pintando!😃

A nosotros nos ha dado más por la cocina. Ya ves que no somos muy originales. ¡No queda levadura fresca en ningún supermercado!
Sin ir más lejos hoy le hemos hecho a Laura una mona de Pascua que es una clave de sol o por lo menos quiere parecerlo. Ya sabes. Por aquello de que siempre está ligada al mundo de la música y también que, con la edad que tiene, ya no parece que los patitos o los cocodrilos le encajen mucho, la verdad.
Bueno, ya que estamos "confitados" vamos a intentar llevarlo lo mejor posible y vosotros pensad en la parte positiva. Si tenéis la casa pelá seguro que os podéis dedicar a hacer todo tipo de artilugios con los bolsillos y cuando podáis salir a los mercadillos tendréis mucho más para ofrecer.
Un besote enorme para los dos.
Helen Pi

Juli imagina historias dijo...

Gracias, como siempre Helen, por tu comentario. Tienes razón en que estaríamos pintando porque lo hemos pensado, pero no tenemos pintura 😂así que no podemos hacerlo.
No creas que la casa y como le digo a mi hermana, es agradecida, pues nos toca repasarla de vez en cuando, pero ya más superficialmente.
Es verdad que no hay levadura, nosotros pedimos vía e-mail, porque no salimos, pero no nos traen.
Seguro que la mona os quedó chulísima. Un abrazo a los tres.
Julita