Nos hemos plantado en el mes de Abril casi sin darnos cuenta, pues el mes de Marzo al haber incluido la Semana Santa y San José (aunque este último se celebra todos los años el día 19), ha resultado muy ajetreado y por lo tanto ha pasado demasiado rápido.
Así que aprovecho para poner un cuento que, creo que no desdice mucho de la Pascua que estamos celebrando en estos días.
Julita
Julita
Aún no había amanecido en la Granja,
cuando Tom, el gallo, se puso a cantar como un loco.
Las gallinas trataron de abrir los ojos, mientras murmuraban:
─ ¡Este gallo cada vez canta más
temprano! ¡Nos va a matar de sueño!
A Teo el perro, aún le costó más que a las gallinas el poder levantar
los párpados, pues no en vano se había pasado la noche pendiente de cualquier
ruido que se produjese. Ese era su trabajo, tenía que cuidar de todos los demás
animalitos de la Granja y además le
gustaba mucho hacerlo, sobre todo cuando su amo le daba palmaditas en la cabeza
reconociendo su buena labor. Así que en realidad, él estaba pensando lo mismo
que ellas:
─ ¡Este gallo un día acaba
conmigo! ¡No deja descansar a nadie en paz!
